El golf español ya cuenta con un Protocolo de Apertura del Deporte del Golf, documento oficial elaborado por el conjunto de instituciones que forman la industria del golf en España -la Real Federación Española de Golf (RFEG), las Federaciones Autonómicas de Golf, la Asociación Española de Campos de Golf (AECG), la Asociación Española de Greenkeepers (AEdG), la Asociación Española de Gerentes de Golf (AEGG) y la Asociación Española de Profesionales de Golf (PGA).
El documento recoge una serie de medidas y recomendaciones dirigidas a jugadores y campos de golf para que, cuando las Autoridades Sanitarias lo permitan, pueda retomarse la actividad de forma segura.
El protocolo, que se centra en la idea del golf como un deporte Covid-free -al realizarse al aire libre y no ser una modalidad de contacto-, se divide en tres partes. La primera de ellas define una serie de indicaciones para los jugadores antes, durante y después de la práctica del golf. Entre otras, las reservas deberán hacerse on-line o por teléfono, se deberá acudir desde el aparcamiento hasta el tee del 1 directamente, no se podrán utilizar los rastrillos para reparar los bunkers, las banderas no se podrán tocar ni quitar, los palos y zapatos no se podrán limpiar tras la práctica…
El segundo bloque va dirigido a los campos de golf e incluye una serie de directrices que deberán seguirse de cara a la reapertura de los mismos. Cada campo podrá adaptar las medidas de acuerdo con sus capacidades, siempre y cuando se respeten las limitaciones impuestas por la Administración Sanitaria.
Finalmente, el documento trata de describir el golf español en cifras. España es el primer destino europeo y mundial de turismo internacional de golf. Cerca de 1,4 millones de turistas eligen nuestro país para jugar al golf, un deporte que genera cerca de 30.000 puestos de trabajo y unos ingresos de 2.500 millones de euros. Concluye con una serie de demandas al Gobierno de España para tratar de reducir el perjuicio empresarial causado por la crisis sanitaria.